Camino a Tioman. A las 8 estamos en el jetty (muelle de aquí) de Mersing, y el embarque es un caos. Terminamos haciendo 4 colas, me caigo una vez con la mochila encima y me descalabro una pierna contra un macetero. Muy despierto no voy. Encontramos tres catalanes en la cola, ellos van en otro ferry. Aún así el nuestro va muy lleno. Son 52 km. 5 paradas. La nuestra es la última. De milagro llegamos nosotros y el equipaje. A Salang sólo vamos 3 personas, y el equipaje lo dejaban en el puerto anterior. Antes se habrán bajado más de 200.
La isla es espectacular, pura selva al lado del mar, alguna playa, y montañas. Supera las expectativas. El mar es muy transparente, verde o azul. La isla es grande, 20 km de largo por 11 ancho, lo sabía pero soy muy malo con las medidas, se ve más grande de lo que me parecía en el mapa.
Al final nos hemos quedado 4 noches aquí, la primera en un chalet un poco cueva. Luego nos hemos ido a otros en el Salang Beach Resort. Los nombres suenan muy bien, pero ni los chalets son chalets ni los resorts son resorts .... pero se está estupendamente. Los chalets son las casitas de madera, básicas pero con encanto. Los resorts son cuando hay más de dos chalets. No los cuidan, y siempre parecen mejor por fuera que por dentro. Todo los negocios son muy familiares, y eso me gusta, pero tiene un impacto en el servicio y la calidad. Los locales de la isla viven muy bien del turismo, con muy poco esfuerzo. Solamente llevando gente de playa a playa no se tienen que esforzar más, pero por lo menos evita aquí las grandes cadenas y el turismo masivo.
La verdad es que se hace poco pero el tiempo se pasa volando. Salang es una franja de tierra como de 1 km. Todo muy tranquilo. La parte sur de Salang tienen una playa estupenda, con palmeras y arena, como las de las películas, el mar es super azul y está llena de coral y peces. Enfrente, como a unos 300 metros hay una islita perfecta de piedras y cocoteros, estupenda para snorkel.
Aquí tenemos el primer alojamiento, nos venimos a bañar y a hacer snorkel. Tiene una plataforma en el mar a la que te puedes subir a descansar. Detrás tiene algún local para tomarse una cervecita debajo de un cocotero. Esta isla es duty free así que el alcohol es muy barato. El único problema son las sand flies, el primer día nos respetan, el segundo nos fríen, a partir de ahí nos preparamos un poco.
En la parte de atrás hay un río de aspecto dudoso. Mejora porque con la marea alta se llena de agua transparente. La isla está llena de pequeños ríos como este, pero son de agua oscuras de barro y tierra. Aquí siempre hay unos varanos descomunales. Lagartos monitor de metro y medio. Preciosos. Hay de dos tipos, unos con más colores que otros. Como dinosaurios.
La parte norte de Salang, donde está el segundo alojamiento, es igualmente espectacular, pero menos con la marea baja. También tiene cocoteros y playa, pero no tienen coral y con marea baja hay piedras.
Aquí también hacemos snorkel por las mañanas, pero normalmente nos movemos al otro lado por las tardes. En esta playa tampoco hay nadie, sobre todo durante la semana. La zona sur tiene más alboroto local durante el fin de semana.
Desde aquí las puestas de sol son espectaculares, el sol va bajando, cambiando de color, lo tiñe todo de rojo y se hunde allí donde se acaba el mundo totalmente redondo y brillante, parece que va va a sonar el ruido al apagarse cuando se mete el disco solar en el mar.
Desde aquí las puestas de sol son espectaculares, el sol va bajando, cambiando de color, lo tiñe todo de rojo y se hunde allí donde se acaba el mundo totalmente redondo y brillante, parece que va va a sonar el ruido al apagarse cuando se mete el disco solar en el mar.
Comer y cenar sobre el mar siempre es agradable, las cenas las hacemos en un sitio muy local donde el tipo pesca durante el día y hace BBQ durante la noche, todo muy fresco y rico, aunque siempre usa la misma salsa. Los peces son desconocidos, así que cada día probamos uno distinto, por el método de señalar. El desayuno en el chalet mirando el mar.
Esta isla es la isla de los gatos. Están en todos los sitios. Encima de la sillas, las mesas, las barras del bar, .... grandes y pequeños. Son los reyes. Ni un perro, a los musulmanes no les gustan, no los consideran limpios.
Un día nos hacemos el trekking de Salang a ABC, la siguiente localidad al sur. Son unos 4 km. Es espectacular, pero dura. Según pisamos en la selva ya estoy sudando como un pollo. Hay una subida larga, pero la bajada es mucho más larga. Casi no se ve el camino, cuando te pierdes buscas los cables que van de pueblo a pueblo.
Después de andar como una hora o mas llegamos a la primera playa, espectacular aunque que muy pequeña, el agua es totalmente turquesa. Estamos solos. Queremos parar más adelante para un baño así que seguimos. Antes me quito la camiseta y la escurro, gotas de sudor salen como de una balleta.
Después de perdernos un poco encontramos el camino. De nuevo cuesta arriba pero unos monos nos cortan el paso, están con las crías y un poco agresivos así que nos buscamos unos palos. A la vista de los palos nos dejan el paso libre. Un poco más adelante son dos varanos gigantes, pero son ellos los que se asustan. Después de andar un rato más llegamos a la playa, es Monkey Bay.
Hay una familia rusa ya allí, por lo demás está desierta. Nos vamos a un lado de la playa y nos damos un baño estupendo. Detrás solo esta la selva en la montaña con árboles descomunales. Como no me fío de los monos atamos las mochilas a unos palos para bañarnos tranquilamente. Al rato se va la familia en bote y nos quedamos a disfrutarlo. La marea baja y la playa es cada vez más paradisíaca. Nos decidimos a seguir por que nos queda un rato, justo llega otra familia italiana, esta con niños, buen momento para irse.
Tras otros 20 minutos mas o menos llegamos a Monkey Beach, hemos ido descubriendo los lugares según íbamos andando. La playa es estupenda, salvaje, de arena roja, con los árboles pegados a la playa y solo un par de parejas que ha venido en barca. Nos quedamos un rato pero no nos bañamos aquí. Hablamos con un barquero y parece que la última barca de vuelta será a las 17.00. Son mas de las 15.00 y nos queda hora y media de andar
Luego no es tanto, llegamos como en 50 minutos, pero otra vez sube y baja. Son de los 4 km más largos de mi vida. Se entra por una zona muy bonita con una playa pequeña con rocas y un pequeño resort de buceo. La mala noticia es que todavía queda un poquito más.
Finalmente llegamos a ABC, es como Salang pero con menos gente, menos sitios, otra franja de tierra como de 1 km de largo. Damos unos cuantos paseos hasta que encuentro a un taxi boat que me puede llevar a las 18.00 de vuelta, así que tenemos un par de horas para relajarnos aquí con unas cervezas. Es un sitio estupendo, al lado del jetty, y decidimos que nos vamos a venir unos cuantos días a disfrutar de todavía mas tranquilidad.
Cogemos el taxi entre las rocas y en 10 minutos estamos de vuelta. Cuesta los mismo 3 km en barca que 52. No tienen mal negocio. El paseo es fantástico con la luz, las rocas, la selva, las playas, la luz. Ha sido un día genial. Un poco exigente. Completo.
El último día en Salang contratamos un barco para ir a hacer Snorkel a las islas pequeñas a ver si vemos algo más grande. La primera parada es en Coral island, una isla mediana como a un par de kilometros o tres. El coral es bonito, pero hay menos vida que en la playa de Salang.
La segunda parada es en una playa increíble, en la parte de atrás de la isla, de aguas cristalinas y rocas, parece de mentira sacada de un catálogo de viajes de fotos manipuladas.
La segunda parada es en una playa increíble, en la parte de atrás de la isla, de aguas cristalinas y rocas, parece de mentira sacada de un catálogo de viajes de fotos manipuladas.
La tercera parada es en unas rocas que afloran cerca de Coral island. El coral aquí es muy bonito, con formaciones que se extienden con todos los colores, corales duros y blandos, anémonas y aquí sí mucha vida.
Cuando ya nos vamos los dos chicos que vienen en la barca ven unas tortugas y me voy tras ellas. Son descomunales, verdes, preciosas. Cuando saco la cabeza estoy lejos de la barca. Veo otra tortuga y la intentó seguir pero contra la corriente no hay manera. Después de intentarlo mas de cinco minutos sin moverme tengo que pedir ayuda y la barca viene a por mí. Menos mal que esta vez llevaba chaleco. También me llevo un recuerdo de una medusa.
La última parada es en la islita enfrente de Salang. No se sabe si es más bonito encima o debajo del agua.
También el coral aquí es bonito y la luz estupenda. Veo una última tortuga, más pequeña, e infinidad de peces de colores. También empezamos a ver los grandes bivalvos. Tienen un tamaño increíble, y cuando están vacías las conchas pesan una barbaridad. He leído que la más grande una tonelada. Las vamos a ver en cada inmersión, como los peces.
También el coral aquí es bonito y la luz estupenda. Veo una última tortuga, más pequeña, e infinidad de peces de colores. También empezamos a ver los grandes bivalvos. Tienen un tamaño increíble, y cuando están vacías las conchas pesan una barbaridad. He leído que la más grande una tonelada. Las vamos a ver en cada inmersión, como los peces.
Es el final de la excursión. 60 ringitt por cabeza y a puerto. Quedo con el chico para que a las 17.00 después de comer nos lleve a ABC a pasar allí unos días. Ha sido otro día genial.
Me leí Ficciones de Borges, por segunda vez. Por segunda vez lo volví a entender poco. Da igual lo que me esfuerzo o lo relajado que esté. Debo ser yo. Sólo me gustan realmente un par de historias, las otras me resultan originales (algunas). Esta parte del universo borgiano de laberintos, mundos que se reflejan en espejo... me cuesta. No lo puedo recomendar. Lo siento.
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